Trabajo: solo tres días por semana
David Foronda H.
5/24/20252 min leer
Hace años un multimillonario –que entonces ocupaba el puesto 2 a nivel mundial del ranking de los más ricos y hoy está en el 19– sugirió implementar el trabajo de solo tres días a la semana. Me refiero al mexicano Carlos Slim, de ascendencia libanesa, que hizo conocer lo que a muchos quizá les pareció descabellado: que funcionarios, empleados, obreros y otros debieran laborar únicamente tres días por semana. Esa propuesta fue rebatida por muchos sin haberla analizado detenidamente, de acuerdo a lo que se comentó en ese tiempo.
Se explicó que la propuesta de trabajar tres días a la semana con jornadas de 12 horas, es una idea que busca mejorar el equilibrio entre vida personal y laboral, sin afectar los ingresos. La alternativa propone un esquema de trabajo más flexible, donde la semana laboral se concentra en tres días, lo que podría permitir a las personas tener más tiempo libre y, al mismo tiempo, mantener la misma carga de trabajo semanal. Lo de Slim no se basa en reducir la cantidad de horas semanales, sino en cambiar la distribución de esas horas. En lugar de trabajar cinco o más días, se propone concentrar la jornada laboral en tres días con jornadas de 12 horas diarias, algo que puede mejorar la calidad de vida de las personas al permitirles tener más tiempo libre para otras actividades. Al concentrar la jornada laboral en menos días, se espera que las personas puedan ser más productivas y eficientes durante esos días de laboro. Se la considera adaptable a diferentes sectores y tipos de trabajo, siempre y cuando se pueda mantener la eficiencia y la cobertura de las actividades laborales.
Por cierto que tal iniciativa no deja de ser muy interesante, sobre todo en el mundo de hoy, cuando se habla de que la salud mental a nivel global está por demás deteriorada, a raíz del exigente trabajo en todo sitio que origina el tan temido estrés, mal de los tiempos contemporáneos, que da pie a una serie de enfermedades y males, puesto que los trabajadores se sienten como una especie de prisioneros en sus fuentes laborales, y además por una serie de presiones a los que se ven sometidos. Es más, trabajan horas fuera de lo convenido o, al final, exclaman “estoy reventado de trabajar tanto, siendo que el salario o sueldo no es elevado en la misma proporción”.
Digamos que mucho más en nuestro país, donde empleadores “negreros” aprovechan la necesidad de empleo de trabajadores, cuando los obligan a trabajar por el sueldo mínimo nacional, y en casos ni siquiera eso, arriba de 10 horas, incluso sábados, con turnos dominicales. Explotación cometen, por lo que sería bien que la jornada laboral sea de 12 horas diarias, pero solo por tres días, con el salario o sueldo acordado. Es una idea “a la rápida”, hay mucho más que decir sobre el tema, empero valdría la pena estudiarla para frenar a inequitativos y abusivos empleadores.