𝗗𝗿𝗮𝗺𝗮 𝗲𝗻 𝗵𝗼𝗴𝗮𝗿𝗲𝘀 𝗱𝗲𝗹 𝗽𝗮𝗶́𝘀
David Foronda H.
5/13/20252 min leer
Una de las acepciones de drama es “suceso infortunado de la vida real, capaz de conmover vivamente”, y a la vez también quiere decir “desgracia, desdicha, desventura, tragedia, calamidad, suceso, odisea”. Y justamente es lo que hoy están pasando los hogares bolivianos, sobre todo de las denominadas grandes mayorías nacionales, vale decir, los que menos tienen y deben afrontar la falta de fuentes de trabajo, la inseguridad ciudadana, los problemas de salud, dado que tampoco tienen atención médica, por carencia de recursos, etc. Viven cada día un drama, o sea desgracias, desdichas, tragedias, calamidades y más.
Todo ello a raíz de la crisis o problema económico-financiero por el que Bolivia atraviesa –se dice– debido al desacertado manejo de los últimos gobiernos, de quienes incluso se afirma que despilfarraron los enormes ingresos por la venta del gas, olvidando objetivos prioritarios para el país y su gente. Diversos analistas coinciden en este hecho. “Luego del gusto, el susto”, suele decirse. No obstante, a ellos no les hace mella, y los “paganinis” resultan ser casi todos los bolivianos, sin que hayan tenido la necesidad de manejar las arcas públicas y menos haber administrado el Estado.
La elevación constante de precios de los artículos componentes de la canasta familiar, y en general prácticamente de todo, viene causando dramas de toda índole en la mayor parte de los hogares, que van desde peleas, impotencia que impide avizorar mejores días, reducción de la alimentación, etc., e incapacidad de lograr otros ingresos extras porque “no hay cómo”, de acuerdo a lo señalado una y otra vez por nuestra gente. Ello se explica por la escasez de fuentes de trabajo, lo que significa el crónico desempleo que, en Bolivia, viene desde hace mucho tiempo, sin que algún gobierno le haya dado una solución hasta hoy.
Sobre el particular, el Ing. y analista Héctor Antonio Uriarte, sostiene que desde el anterior gobierno masista “se ha estado engañando a toda la gente con una serie de enunciados que nunca los cumplieron. Los precios, de todo, están por las nubes y, por ejemplo, el transporte subió en más de un veinte por ciento, lo que no ha recibido como incremento en sus haberes el trabajador, con el último aumento salarial. El dólar paralelo en las calles está en quince bolivianos y eso es un secreto a voces. Bolivia importa todo, y si no hay dólar para importar, entonces todo sube, como los medicamentos, y artículos que se trae de afuera. Cada día que pasa nos hacemos más pobres. Y que no maree la perdiz el Director del INE, lo digo respetuosamente, y por ello convoco a las autoridades de gobierno para que tomen medidas de una buena vez y estabilicen la economía nacional. Repito, cada día la población se hace más pobre. Debo recordar que, en su plan de gobierno, en el primer gobierno masista, valga la redundancia, dice que hasta 2011 ya estaríamos mucho mejor, pero no es así porque no han cumplido. Presidente, vicepresidente, ministros, Banco Central de Bolivia, etc., tomen medidas, háganlo ya, porque la gente en el país está sufriendo mucho, el pueblo está desesperado. Si bien el INE dice que la inflación subió en un cinco por ciento, y algo que costaba 100 Bs ahora cuesta 105, etc., pero el transporte subió en cuarenta centavos, y eso es más de 20 por ciento, ya lo dije y lo repito”.
Ese es, pues, el drama en los hogares bolivianos, lo que es conocido por todos. Hagamos votos para que tal situación no empeore.